Brasil dice que tendrá capacidad energética para nueva economía de datos en próximos 15 años
SAO PAULO, 2 oct (Xinhua) — El Gobierno de Brasil posee una matriz energética capaz de enfrentar los retos que demandarán los centros de datos y la inteligencia artificial en los próximos 15 años, aseguró hoy miércoles el ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira. “La transición energética se ha transformado en una nueva economía”, afirmó el ministro durante la reunión del Grupo de Trabajo del G20 sobre Transiciones Energéticas, que se celebró en Foz do Iguaçú, en el sur de Brasil. Silveira destacó los avances de Brasil en la diversificación de su matriz de energías limpias y señaló que la demanda de los centros de datos impulsados por inteligencia artificial será tres veces mayor que la actual, un escenario para el cual Brasil “ya está preparado”. El ministro también destacó la importancia de la interconexión del sistema eléctrico brasileño y la modernización de la distribución de energía, elementos clave para garantizar un futuro energético sostenible. “Las nuevas energías, como la solar y la eólica, deben integrarse eficazmente en el sistema eléctrico, garantizando estabilidad y eficiencia”, expresó. En el marco del G20 y las negociaciones climáticas globales, Brasil propuso la creación de un fondo global para la transición energética, financiado con recursos de la industria del petróleo y el gas. Silveira dijo que Brasil seguirá produciendo petróleo y gas mientras que el mundo lo demande, defendiendo al mismo tiempo el proyecto de ley “Combustible del Futuro”, orientado a financiar la industria de energías renovables. “Brasil aprovecha su potencial. Queremos exportar sostenibilidad con bienes manufacturados, para que se generen empleos en el país, combatiendo las desigualdades y con respeto a las leyes ambientales, además de ayudar a evitar que el mundo enfrente un colapso ambiental”, dijo. La reunión de ministros del G20 debe llevar propuestas para la cumbre presidencial del foro que se realizará el 18 y 19 de noviembre en Río de Janeiro. Fin