RESUMEN: Paro y toma de universidades argentinas ante veto presidencial a ley que aumentaba presupuesto

BUENOS AIRES, 10 oct (Xinhua) — Las universidades nacionales de Argentina realizaron hoy jueves un paro general de actividades mientras sus alumnos “tomaron” las sedes de las casas de estudio como rechazo al veto del presidente argentino, Javier Milei, a una ley del Congreso que estipulaba un incremento presupuestario para esos establecimientos educativos. Las protestas fueron encabezadas por sindicatos universitarios y entidades estudiantiles después de que la Cámara de Diputados ratificara durante la víspera el veto presidencial del 3 de octubre a la ley que mejoraba el presupuesto universitario y los salarios del personal para hacer frente a la inflación. La Asociación del Personal de la Universidad de Buenos Aires (APUBA) emitió un comunicado en redes sociales diciendo que “la UBA está de luto”, tras caer la norma que mejoraba su presupuesto. En igual sentido se pronunciaron el Frente Sindical de Universidades Nacionales y el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), lamentando que el Congreso, al ratificar el veto de Milei, “le dio la espalda a las universidades públicas”. El CIN manifestó a través de un comunicado que el sistema universitario público enfrenta dificultades y que el 70 por ciento de los salarios del personal docente y no docente está por debajo de la línea de la pobreza. En ese marco, al menos 24 universidades nacionales fueron tomadas por estudiantes, entre ellas la UBA, la Universidad Nacional de Córdoba (centro), la Universidad Nacional de Salta (norte) y la Universidad Nacional del Litoral (este), mientras que el sistema universitario público declaró un paro nacional para el próximo 17 de octubre. En ese marco, el Gobierno argentino consideró que las tomas de universidades son “un delito”. “El espacio para discutir el presupuesto universitario, o los fondos de las universidades, es el Presupuesto 2025, discusión que estamos a instantes de iniciarla. Ese es el marco y por supuesto que nos solidarizamos con la mayoría de los estudiantes que quieren ir a investigar, a estudiar, a avanzar y que no los dejan”, declaró este jueves el portavoz presidencial, Manuel Adorni. Durante una conferencia de prensa en la Casa de Gobierno, el funcionario indicó que “pese a la negativa de los gremios universitarios, el Gobierno otorgará un 6,8 por ciento de aumento al personal docente y no docente para el mes de octubre. Prefirieron rechazar el aumento y habilitar la toma de las universidades antes que aceptar el aumento y seguir trabajando para mejorar la situación”, reprobó el funcionario. Adorni añadió que “el 89 por ciento de los fondos transferidos a las universidades entre 2015 y 2022 no fueron rendidos. Y, para nosotros, los argentinos merecen y deben saber qué se hace con la plata que aportan de su bolsillo para pagar, en este caso, la educación de todos los estudiantes”. La víspera, el Congreso de Argentina respaldó en sesión especial el veto de Milei a una ley que aumentaba el presupuesto para las universidades nacionales. La votación, realizada en la Cámara de Diputados para ratificar la ley que observó el Ejecutivo el 3 de octubre, obtuvo un total de 160 votos positivos, 85 negativos y cinco abstenciones, por lo que no alcanzó el respaldo de dos tercios de los presentes, un piso que era necesario para sostener la validez de la norma. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), la norma vetada suponía una erogación equivalente al 0,14 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país sudamericano. La iniciativa declaraba la emergencia presupuestaria del sistema universitario nacional y preveía una distribución fija del presupuesto, un 85 por ciento para salarios y el resto gastos generales, con un mecanismo de actualización bimestral atado a una fórmula que combina el Índice de Precios al Consumidor, la evolución del tipo de cambio (paridad peso-dólar) y la variación en las tarifas de los servicios públicos. Al justificar el veto a la norma, el Ejecutivo señaló que lo hacía por tratarse de una ley contraria a la política oficial de “déficit cero”. La medida de veto había sido anticipada por distintos funcionarios gubernamentales, por lo que un día antes de conocerse, el 2 de octubre, miles de estudiantes se movilizaron en distintas ciudades de Argentina para expresar su rechazo, manifestaciones que volverán a realizarse el 17 de este mes, según anunciaron los gremios universitarios. Según un reciente reporte de la UBA, esa casa de estudios enfrenta una reducción del 80 por ciento de su presupuesto en términos reales para educación, salud, ciencia, técnica y hospitales universitarios. El Ejecutivo adujo al vetar la ley que la iniciativa carecía de previsión presupuestaria y de los recursos necesarios para su financiamiento. Fin