Corte Suprema de Brasil ordena medidas urgentes para combatir incendios forestales
BRASILIA, 10 sep (Xinhua) — El juez Flávio Dino, del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil, emitió hoy martes nuevas órdenes al Gobierno en respuesta a la grave ola de incendios que afecta al país, en medio de la peor sequía registrada y bajo sospechas de que muchos focos son provocados. Dino ordenó el despliegue de fuerzas policiales y bomberos militares de estados no afectados hacia las áreas más impactadas, así como una investigación exhaustiva de las causas de los incendios por parte de la Policía y el Ministerio Público, además de la requisición de aeronaves tanto militares como privadas para combatir las llamas. El magistrado también exigió la creación de un plan de acción de emergencia para prevenir y controlar los incendios forestales de cara a 2025. Estas medidas fueron anunciadas tras una audiencia en la sede del STF con representantes del Poder Ejecutivo para discutir el manejo de la crisis en la Amazonia y el Pantanal. “No podemos normalizar lo absurdo. Tenemos que mantener la extrañeza con el hecho de que el 60 por ciento del territorio nacional está sintiendo los efectos de los incendios y quemas forestales. Esto es absurdo, esto es inaceptable. Tenemos que reconocer que estamos viviendo una auténtica pandemia de incendios forestales”, afirmó. Dino dijo que Brasil debe controlar los incendios para evitar un alza en los precios de los alimentos y posibles sanciones internacionales por incumplimiento de acuerdos medioambientales. El magistrado subrayó que, además de las consecuencias del cambio climático, es crucial reconocer el impacto de acciones humanas criminales. El juez ordenó una acción conjunta entre la Policía Federal, la Civil, la Fuerza Nacional y el Ministerio Público para investigar las causas de los incendios en 20 localidades del norte y centro-oeste del país, que concentran el 85 por ciento de los focos detectados. Según el Centro Nacional de Vigilancia y Alerta de Desastres Naturales, la actual sequía, la peor desde 1950, afecta al 58 por ciento del territorio nacional, con incendios de gran magnitud registrados en Sao Paulo, el Pantanal y la Amazonia. Fin