Seis puntos de coincidencia que brindan un firme soporte al próspero desarrollo de las relaciones China-ALC en la nueva era
BEIJING, 19 nov (Xinhua) — Este año se cumple el décimo aniversario de la propuesta de una comunidad de futuro compartido China-América Latina y el Caribe (ALC) por parte del presidente chino, Xi Jinping. Desde la perspectiva de la historia y la civilización, encontramos seis puntos de coincidencia entre China y ALC. Precisamente, esta cercanía natural grabada en los genes ha brindado un firme soporte a la voluntad del pueblo respecto del desarrollo próspero de las relaciones entre China y ALC en la nueva era, de acuerdo con la dirección general para America Latina y el Caribe del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, citada por el último número de la revista China Hoy. Primero, una historia de civilización de desarrollo independiente. El mandatario chino señaló que la nación china tiene una historia humana de un millón de años, una historia cultural de 10.000 años y una historia de civilización de más de 5.000 años. La civilización china es la única gran civilización del mundo que ha durado continuamente y se ha desarrollado en forma de país hasta el día de hoy, y ha hecho una gran contribución a la causa del progreso de la civilización humana. Asimismo, en América se desarrollaron las civilizaciones espléndidas de los mayas, los incas y los aztecas, con destacados logros en cuanto a los calendarios, la agricultura, la arquitectura, la metalurgia y la textilería. Segundo, un gen cultural amante de la paz. China y ALC comparten muchas cosas en sus visiones del mundo y del orden, sobre todo en cuanto a la promoción de la paz. Entre los siglos XVI y XIX, la Ruta Marítima de la Seda que cruzaba el océano Pacífico se convirtió en un canal crucial para los intercambios entre China y ALC, fomentando de forma considerable el desarrollo económico y social de los dos lados y siendo considerada como un gran suceso dentro de la historia de los intercambios entre China y ALC. “Los pioneros se ganaron su lugar en la historia no como conquistadores con barcos y caballos de guerra, armas o espadas. Más bien, se les recuerda como emisarios amistosos que encabezaban caravanas de camellos y veleros cargados de mercancías”, afirmó Xi. Tercero, una virtud moral noble y sencilla y un carácter nacional amable y amistoso. En 1960, cuando el entonces presidente chino Mao Zedong recibió una delegación de periodistas latinoamericanos, el comunicador peruano Antonio Fernández Arce mencionó una máxima de los incas: “No robar, no mentir y no ser ocioso”. “¡Qué buena norma moral!”, exclamó el presidente Mao tras escucharlo. Esto contrasta con el lema de “mentimos, engañamos y robamos” predicado por algunos países. Los pueblos tanto chino como latinoamericano y caribeño son hospitalarios y compasivos, y no han dudado en echarse una mano en momentos críticos, tales como el terremoto de Haití y la pandemia de COVID-19. Los pueblos de ambas partes han distinguido claramente quién es el amigo verdadero en situaciones decisivas. Una comunidad de futuro compartido China-ALC no es un concepto vacío, sino una acción concreta. Cuarto, un espíritu indomable de anticolonialismo y antihegemonía. En los tiempos modernos, innumerables personajes chinos con elevados ideales habían intentado salvar a la nación, pero todos fracasaron. Solo el Partido Comunista de China (PCCh) logró unir y dirigir al pueblo chino para crear la Nueva China independiente, cambió la fisonomía de pobreza y atraso del país y, con la modernización china, está promoviendo integralmente la gran revitalización de la nación china. Durante un largo tiempo, los pueblos latinoamericano y caribeño libraron una ardua lucha contra el imperialismo y el colonialismo y por la independencia nacional. En el marco de este proceso, China y los países latinoamericanos y caribeños se apoyaron mutuamente y forjaron una amistad profunda. China está dispuesta a seguir trabajando con ALC para promover el establecimiento de un mundo multipolar igualitario y ordenado, así como una globalización económica inclusiva y beneficiosa para todos. Quinto, la identidad común del Sur Global. Tanto China como los países latinoamericanos y caribeños son países en vías de desarrollo, así que naturalmente son miembros del Sur Global. Como países del Sur Global, el desarrollo es la primera prioridad para China y ALC, y la modernización es el sueño común de ambos pueblos. China está dispuesta a liderar la construcción de alta calidad de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, compartir oportunidades de desarrollo con los países latinoamericanos y caribeños y lograr un desarrollo común. Sexto, una orientación de valores centrada en el pueblo. El PCCh tiene como propósito fundamental servir de todo corazón al pueblo, mientras que los países latinoamericanos y caribeños se esfuerzan también por mejorar la vida del pueblo, reducir la pobreza y promover la equidad social. Fin