BRASILIA, 20 nov (Xinhua) — China está dispuesta a trabajar junto con Brasil en un espíritu de perseverancia y esfuerzos constantes para construir una comunidad de futuro compartido entre los dos países e iniciar otros “50 años dorados” de las relaciones bilaterales, afirmó el miércoles el presidente chino, Xi Jinping. Durante su intervención en un gran banquete de bienvenida ofrecido por el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, en Brasilia, Xi le agradeció, así como al pueblo del país sudamericano, por su cálida y amistosa acogida y felicitó a Brasil por lograr un desarrollo notable bajo el liderazgo de su actual mandatario. Tras señalar que los vastos océanos que separan a los dos países nunca han obstaculizado su amistad y comprensión mutua, Xi dijo que ambas naciones poseen características distintivas al tiempo que se mezclan armoniosamente, con la apertura, la innovación, la diversidad y la unidad como sus rasgos compartidos y aspiraciones comunes. Añadió que él y el presidente Lula habían anunciado la elevación de los lazos bilaterales a una comunidad de futuro compartido China-Brasil para un mundo más justo y un planeta más sostenible, y presenciaron la firma de documentos de cooperación que alinean la iniciativa de la Franja y la Ruta con las estrategias de desarrollo de Brasil. Mirando hacia atrás, las dos partes tienen todas las razones para estar orgullosas de los logros alcanzados en sus relaciones y, mirando hacia adelante, tienen confianza y están llenas de expectativas por el futuro brillante de sus nexos, comentó. Por su parte, Lula manifestó que el presidente Xi y él lideran los dos mayores países en desarrollo de los hemisferios oriental y occidental, respectivamente, y aseguró que ambos están plenamente conscientes de las preocupaciones de la gente y se encuentran comprometidos con la mejora de los medios de vida y la erradicación de la pobreza. Igualmente, expresó su profunda admiración por los logros de desarrollo de China bajo el liderazgo del presidente Xi, en particular el hito de sacar a 100 millones de personas de la pobreza. Resaltó que el mandatario chino ha sido un ejemplo para el mundo al trabajar por el bienestar de las personas, defender la equidad y la justicia sociales, y abogar por la paz frente a la guerra, la cooperación frente a la confrontación y la creación frente a la destrucción. Desde el establecimiento de relaciones diplomáticas hace medio siglo, los nexos Brasil-China se han convertido en un modelo de solidaridad, cooperación, beneficio mutuo y ganancias compartidas entre los países del Sur Global, sostuvo Lula. De igual modo, indicó que la alineación de las estrategias de desarrollo entre ambos países contribuirá a su prosperidad común y demostrará al mundo que pueden alcanzar el desarrollo, la revitalización y la justicia a través de sus propios caminos. Tanto Brasil como China apoyan el multilateralismo y abogan por la resolución pacífica de las disputas, puntualizó Lula, agregando que su cooperación tendrá un impacto significativo y trascendental en el mundo. Brasil espera trabajar estrechamente con China para construir una comunidad de futuro compartido entre los dos países, abundó. Fin
